junio 24, 2013

Charlas

-Te apresuras... esas cosas suelen suceder. Si miras enfrente tuyo veras que tienes la respuesta.
- Pero... que me dices si esa respuesta la vengo viendo hace años ya... déjate de estupideces.
-Serénate; esas cosas no se fuerzan son simplemente naturales.
-Esa es una vaga excusa que pones todo el tiempo, no me vengas a querer convencer.
-Ah! Mira quien habla, por falta de tiempo terminas no haciendo nada... ¿Acaso tienes miedo?
-¿Miedo? ¿Yo? Lo único que sabes hacer es hablar, divagar en tu mente y sacar ideas que carecen de valor en la realidad, vives en un mundo utópico, vives en tu mente, en tu subconsciente ¿ Quien es el miedoso?
-Al menos me tomo el tiempo necesario para pensar, tu no lo haces simplemente actúas y te dejas llevar por la corriente.
-Patrañas, yo me acomodo y vivo al ritmo del mundo, al fin y al cabo no se puede vivir contra la corriente.
-Pierdes tu esencia natural por dejarte llevar ¿Sabías?
-Pierdes tu tiempo real, envejeces y la vida pasa... seguí pensando, planeando, ideando y no acciones, así tu vida terminara apenas te des cuenta.
-Sabes bien que no puedo parar de idear, planear, pensar; y es un gran defecto pero es mi virtud también en cambio tu responsabilidad es un engaño. Vivís llenándote de miedos, excusas, barreras para no ver la realidad; todo por miedo a perder el tiempo y no ser "productivo".
-No me hagas reír, si no eres responsable no llegas a nada, y todo eso que llamas miedos, excusas, barreras son realidades que uno tiene que enfrentar y asumir como propias sino no puedes subsistir en este mundo. No me vengas con tus ideales, el amor y la paz... el tiempo corre y nadie te espera, se te va a escapar el tren y yo no pienso dejarlo ir.
-Espero que realmente es lo que deseas, ya que yo si se lo que quiero.
-Claro que lo sabes pero no accionas, yo prefiero ver en el camino.
-Creo que te equivocas, hay cosas que suceden en el camino que no puedes cambiarlas.
-Estoy dispuesto a padecerlas si es necesario... Pero quedarme en mis pensamientos jamás.
-Que irónico ambos lo hacemos.

Dio un sorbo a su vaso de agua que reposaba en la mesa de luz, convencido esta vez que si giraba hacia la pared y acomodaba la almohada por fin podría dormir.